jueves, 18 de marzo de 2010

EL NUEVO HOMBRE



La Biblia dice en 2 Corintios 5:17 “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas” Estimado lector, todos lo hijos de Dios, estamos en Cristo, por consiguiente somos nuevas criaturas, tenemos el hombre nuevo, pero también poseemos el viejo hombre, Efesios 4:22 enfatiza claramente que el viejo hombre ESTA, no que estuvo, por ende el viejo hombre esta en todos nosotros los hijos de Dios.

Es importante que todo hijo de Dios, entienda que es un nuevo hombre, o sea una nueva criatura, además que esta llamado a vestirse de ese nuevo hombre. Pablo dijo en Efesios 4:24, "Vestios del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad."

El hijo de Dios, como la iglesia de Jesucristo que él es, está llamado a enseñar a vestirse del nuevo hombre a todos los demás, ese hombre que fue creado por Dios como un ser conocedor del evangelio, equilibrado y moderado, lógicamente de buen proceder, esto se debe comenzar, con enseñarle, como Dios enseño desde el principio, a ser señor de todo.

Generis 1:26-28 dice: “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creo Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra” esta es la autoridad que Dios delego u otorgó a sus hijos, sin embargo por desconocimiento de las promesas de Dios contenidas en el Evangelio, algunos, sino la mayoría, no han tomado para ellos esta herencia o legado de Dios, en Gálatas 4:1 Pablo dice: “Pero también digo; Entre tanto que el heredero es niño, en nada difiere del esclavo, aunque es señor de todo”

Ese nuevo hombre, del cual todo hijo de Dios debe vestirse, está perfecto (Hebreos 10:14), bendecido (Efesios 1:3), justificado Romanos 5:1, santificado, redimido (1 Corintios 1:30)
y es creado según Dios, tiene el mismo Espíritu de Dios (Romanos 8:11), tiene la mente de Cristo (1 Corintios 2:16). Este es el verdadero nuevo hombre.

Aun el señor Jesús, al vivir aquí en la tierra, con su actitud y proceder vistió a la mujer samaritana. Hoy en día el llamado para nosotros los líderes es a vestir a todos los hijos de Dios de ese nuevo hombre en Cristo. Esto solo se logra enseñándoles la verdad del evangelio.

Analicemos lo que el apóstol Pablo dijo en Colosenses 3:12-14, "Vestios, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. Y sobre todas estas cosas vestios de amor, que es el vínculo perfecto."

A todas las personas, especialmente a las más débiles, hay que vestirlas de ese nuevo hombre, y esto se logra única y exclusivamente a través de enseñarles el evangelio de la gracia de nuestro señor Jesucristo. Ahora bien, esto debe hacerse con el mejor ingrediente posible y esto es el Amor. Pablo dijo en 1 Corintios 12:23, "y a aquellos del cuerpo que nos parecen menos dignos, a éstos vestimos más dignamente" el llamado es a vestir del nuevo hombre, a todos los cristianos, hijos de Dios, esto se logra enseñándoles el evangelio, sin embargo a los que se consideran menos dignos hay que hacerlo de una mejor manera, en otras palabras con más diligencia.

Muy estimado amigo o hermano lector, si usted es un líder, la pregunta que en este momento le haríamos sería ¿está usted vistiendo, a quien lo escucha, de ese nuevo hombre que Pablo menciona? Esto se logra enseñándole a través del evangelio contenido en la Biblia, en el cual se aprende a gobernar sobre sí mismos. Para poder hacerlo debe usted primero vestirse del nuevo hombre, para entonces poder vestir a otros de lo mismo que Dios lo vistió a usted.

El nuevo hombre actúa recatadamente y ejerce dominio sobre sí mismo y Sobre las circunstancias que le rodean, ha entendido el concepto de la moderación en todas las áreas de su vida.

Bendiciones,

Pastor Ramon Luis

LA DIFERENCIA ENTRE PROBADO O TENTADO I

Primero vamos a estudiar lo que significa estas palabras:

PRUEBA dokimaso prueba o aprobar, comprobar, distinguir o examinar

TENTACION peirasmos poner a prueba, experiencia, disciplinar, adversidad.

Santiago 1:2-8.
"2 Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas,3 pues ya saben que la prueba de su fe produce constancia.4 Y la constancia debe llevar a feliz término la obra, para que sean perfectos e íntegros, sin que les falte nada.5 Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie.6 Pero que pida con fe, sin dudar, porque quien duda es como las olas del mar, agitadas y llevadas de un lado a otro por el viento.7 Quien es así no piense que va a recibir cosa alguna del Señor;8 es indeciso e inconstante en todo lo que hace".

Santiago 1-12-18.

"12 Dichoso el que resiste la tentación porque, al salir aprobado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a quienes lo aman.13 Que nadie, al ser tentado, diga: «Es Dios quien me tienta.» Porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni tampoco tienta él a nadie.14 Todo lo contrario, cada uno es tentado cuando sus propios malos deseos lo arrastran y seducen.15 Luego, cuando el deseo ha concebido, engendra el pecado; y el pecado, una vez que ha sido consumado, da a luz la muerte. 16 Mis queridos hermanos, no se engañen.17 Toda buena dádiva y todo don perfecto descienden de lo alto, donde está el Padre que creó las lumbreras celestes, y que no cambia como los astros ni se mueve como las sombras.18 Por su propia voluntad nos hizo nacer mediante la palabra de verdad, para que fuéramos como los primeros y mejores frutos de su creación".

El tema de las pruebas y tentaciones nos hacen pensar siempre en los tiempos difíciles de nuestra vida. El hijo de Dios tiene que enfrentarse a un mundo hostil diariamente. Sea en el hogar, el trabajo, en la iglesia, con la familia, o en el vecindario, las pruebas y tentaciones están listas para acosarnos. ¿Qué creyente podrá decir que nunca ha sufrido tentación?.

Santiago comienza: “Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas,” de esta forma se identifica con sus hermanos en el momento de la prueba de ellos.

Hay una diferencia entre ser “probado”, y ser “tentado” a hacer el mal.
La prueba es casi siempre por medio de las circunstancias, o aun enfermedades, pero la tentación, es más bien a hacer algo (tomar una decisión) que es obras buenas que Dios preparo de antemano o ceder a las obras muerta de la carne.

La prueba nos lleva a la perfección; pero ceder a la tentación nos puede llevar a hasta la muerte.
Muchos han usado el texto de 1 Corintios 10:13, como ocasión para culpar, o darle la responsabilidad a Dios por la tentación. Pero debemos aclarar que Dios usa la “prueba” para el bien nuestro, pero no nos tienta a hacer el mal.

En el Padre nuestro (Mateo 6:13) encontramos que el SEÑOR JESUS incluye la petición de ayuda para no caer en tentación. La Biblia de las Américas al igual que la Reina Valera dicen: “Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal.” La Nueva Versión Internacional dice: “Y no nos dejes caer en tentación, sino líbranos del maligno.” Esta última versión nos aclara mejor el sentido de lo que nuestro SEÑOR quería decir. Como nos dice Matthew Henry: “Y no nos sometas a una prueba dura, sino líbranos del Mal.”


Considérense muy dichosos (Santiago 1:2) —La Biblia de las Américas dice: “Tened por sumo gozo.” El apóstol nos insta a gozarnos en la prueba. No es ningún secreto que mientras todo marche bien, uno puede cantar y alabar a Dios en todo tiempo. Pero no es así en la prueba.

Es ahí donde el apóstol nos recalca: “Tened por sumo gozo”. ¿Por qué razón? Porque al igual que la canción que decía: “Después de la tormenta, viene la calma”, así es con la prueba. Ninguna prueba dura para siempre. Aunque uno puede vivir en una situación donde se prohíbe el culto a nuestro SEÑOR JESUCRISTO y entonces la prueba de la fe es constante.

Bendiciones,

Pastor Ramon Luis